Un año, todo un reto

Los 52 golpes, un reto para escritores…

Hace pocos minutos terminé y subí el golpe 52, el último relato del año.
52 relatos escritos semana a semana me han curtido como autor.

Ray Bradbury estaría orgulloso

Ray Bradbury

Aquí unos recuerdos hablando del reto por si te faltan datos:
AQUÍ

Desde que empecé a ahora hay un buen trecho recorrido y he mejorado mi letra. Estoy muy feliz y agradecido por aceptarme y poder ponerme las pilas.
El siguiente paso es corregir, corregir, corregir, ampliar, modificar, recortar, corregir y corregir hasta convertir este historia en relatos, esta novela río en una fuerte corriente de literatura novelada que ningún editor pueda dejar escapar sin publicarla ofreciéndome un 50% de los royalties.

Aquí comparto la historia, el principio y el «final» que no termina de existir:

Inicio, el universo compartiéndose

La totalidad

El finalem

Quiero terminar compartiendo esta fantástica página/reto y animando a la gente a participar:

Un año, todo un reto

Novelas de relatos

Me gusta escribir relatos, me encanta leer novelas y ahora estoy escribiendo una mezcla de ello. Un universo compartiéndose.

Sé que no es una idea original  pero, si soy sincero, no he visto jamás un libro escrito de este modo, que ofrezca la posibilidad de leerse como se quiera, empezando por cualquier capítulo porque son relatos que sin estar separados, sí tienen espacio entre ellos, conectados como propone la física cuántica. Quiero aprovechar el conocimiento de los lectores y preguntar por títulos que cumplan esa descripción. Relatos tan unidos como para ser capítulos, pero con esa estructura individualista, como la humanidad misma. Tan gregarios como lobos solitarios; tan libres como dependientes. Muy propio de mí encontrar el equilibrio fuera de la balanza.
Dejad comentarios hablando de las novelas con las estructuras más extrañas que leísteis.
Dejaros absorber por las novelas como si la gravedad os atrapara. Creo que consigo esa sensación con estos relatos, pues conecto los libros y la vida, la fantasía y los sueños con la realidad… No te la pierdas.

Quiero aprovechar para hacer una sinopsis de esta novela que tengo entre manos:

Un universo compartiéndose es la historia de un carro repleto de libros que lleva una mujer por su barrio. Esa mujer es Valeria, una librera que decidió dejar de intentar vender libros para pasar a dejarlos cuando descubrió que su profundidad era mucho mayor de lo que creía. En su vida entran una gran cantidad de personajes estrafalarios, algunos ni siquiera en el plano de la realidad tangible y todos ellos memorables. Llena de metaliteratura, juegos e imaginación, la historia te hace viajar continuamente por miles de lugares y personas, únete a este universo abriéndose y compartiéndose.

Creo que no debemos dejar nunca de experimentar, me niego a decir que todo está inventado y que la originalidad es copiar con astucia… Se pueden hacer aún nuevas mezclas, el universo es demasiado grande como para pensar que ya se hizo todo… Existe el olvido y nuevas fórmulas de mezclar lo existente; se ha escrito mucho pero siempre habrán nuevas historias que contar… Lo que de verdad es un límite es la actitud acomodada del lector que tan solo quiere leer lago sencillo, que lo lleve como en un vagón de primera clase, sin luchas ni percances hasta la siguiente parada donde ir a tomar el sol… ¡No! Al menos no siempre… A veces hay que colarse en un tren de mercancías y pelear con vagabundos por el rincón del vagón que no le da el aire frío directo en la cara. Hay ocasiones que tenemos que coger el camino y andar, solos, valientes, confiando en nosotros y nuestras fuerzas. Lectores valientes e intrépidos hacen falta, eso es lo que hará que los escritores nos pongamos las pilas y creemos nuevas historias dignas de ser abiertas y exploradas.

Universocompartiendose

Novelas de relatos

La maleabilidad de la poesía

Tan volátil, tan libre que…

No necesita esqueleto.

Es viento, por el movimiento de gigantes,

Aves,

Montañas.

Si la creatividad no parece tener ningún final, la poesía se creó para representar eso.

Hace poco me retaron a crear un micro poema usando únicamente los títulos de 3 a 5 libros.

Este fue el mío:

micro-poema, libros.png
Podemos construirle ágilmente la sexta extinción.

El reto vino dado por un profesor de un conservatorio de León llamado, Juan Luís García. Aquí la noticia. Y a continuación os muestro un seguido de poemas gráficos que participaron al reto.

 

 

TinaDeLuisMicro-poema
Tina de Luis

Lorena IpuntoMicro-poema
Lorena Ipunto

MicroPoemaRoman
Román Sanz

 

Micro poema con libros
Elisa García

MicroEli01
Elisa García

 

Jordi Ledesma

Al participar en este reto, me acordé de un libro del que hablé en el blog. Escritura en la libertad. La poesía permite tantas formas de expresarla como un río de cambiar de forma, profundidad, dirección…

La poesía no necesita forma. Es río sin estar sujeta a nada. O puede que ser un océano…

PoemaGráfico_Cesarea.jpg
Fragmento de un poema de Cesárea Tinajero.

Poema propio a la poesía, semi-automático.

La manzana del árbol creció tras la última lluvia sin más futuro que una única caída libre como vida. Se la estaba comiendo un gusano. Un humano mordió la manzana y medio gusano. No hay disgusto para aquellos que aprecian la vida, para los que conocen su lógica.
Se la terminó, y el gusano también.
Se tumbó bajo el manzanar, aquella persona sabía disfrutar de su fruto, de su sombra y hasta de su tronco como apoyo.
Semillas sintieron su nacimiento en aquel antro cálido y húmedo como vientre de madre.
Hermosos manzanares brotaban del interior de la persona; crecieron a explosiones.
Atravesar la piel fue  más fácil de lo que una puede creer.
Los recién nacidos querían abrazar a su progenitora y se afanaron a crecer.
Se retorcían en el aire, expandían sus cuerpos con hojas capturando luz.

Espirales, espirales vegetales vivían y respiraban fuerte. Duendes suicidas se colgaban de ellas. ¡Ser inmortal! (el mágico)

Yo no quiero ser más alimento, no quiero reciclarme más.
Abandono el ciclo. Rompo con el Samsara. Lo dejo. Como si nunca lo hubiera amado. Como si siempre hubiera podido irme.

Ahora me reinventé.
Copié del viento y el agua sus formas.
Llené el cuerpo de sangre, y aprendí algunos bailes. reconstruí los pasos
Crecí hacia abajo y fuí espiral que ya no sigue pautas.

Ahora sí. Ya sé volar.

Soy canto, y mujeres y hombres sueñan con que vivo en sus corazones.

Los ocupo, los acelero, cambio y marcho. Una y otra vez.

Hincho tus pulmones, reinvento el grito eufórico.
Reinvento tu latido.
Soy y seré vuestro lenguaje favorito.
El único lenguaje que interprete vuestra alma.
Que la exprese con palabras.

Estos son unos pocos ejemplos de la libertad de la poesía. Puede que muchos poetas no estén de acuerdo (Nada más humano que la contradicción), y también tienen razón.

No hay otro lenguaje que exprese mejor las emociones humanas. Este nuestro lenguaje emocional, la poesía. Quizás es por eso que cuando intentamos analizarlo nacen muchas interpretaciones. Solo nuestra lógica emocional (nuestro sistema neuronal en el corazón) es capaz de interpretar correctamente un poema, pero expresar ese entendimiento con otras palabras se vuelve todo un muro.

¿Lo has intentado nunca?

La maleabilidad de la poesía